Una Pascua más que feliz

31 Mar. 2024



Qué Domingo de Pascua, señores. Además del sentido religioso que este día tiene para todos los cristianos, en Mataderos y aledaños se vivió de una manera muy especial por el resonante triunfo del primer equipo de Chicago en el clásico ante Almirante Brown.
Y no es para menos. Se volvió a ver un equipo ordenado, ambicioso, seguro de sí mismo, que sabe bien lo que quiere y lo plasma dentro del campo de juego.
Sin mucho brillo en el primer tiempo, apenas dos llegadas para Chicago que no terminaron en gol por muy poco. Primero un cabezazo de Callegari que el arquero visitante sacó por encima del travesaño y un gol legítimo de Castro que el árbitro invalidó por un supuesto offside. La realidad es que el goleador de Chicago estaba habilitado porque el centro fue desviado por un defensor visitante.
Así que muy poco para agregar en lo concerniente a la primera etapa, pero en el segundo tiempo se lo vio más decidido a Chicago. Sin bien no generó jugadas claras, el equipo por lo menos iba, intentaba y llegaba a puro corazón y entrega. Por parte del equipo aurinegro hubo un gol bien anulado por posición adelantada de Brian Castro y no más que eso.
Pero sucedió en una contra perfecta, bien capitalizada por Bergara, éste le hace un túnel en mitad de cancha a un defensor visitante y ve que Martínez venía proyectándose por derecha. Ahí Matías lo pone un pase preciso para que el lateral de Chicago la pique por encima del arquero y la pelota termine entrando junto al palo izquierdo. Golazo faltando pocos minutos par terminar el partido. Muy buena la transición y perfecta la definición.
Delirio y descontrol en los casi 17.000 hinchas que poblaron el estadio y de ahí hasta el final, la fiesta interminable. Justo, merecido para el equipo que más hizo para llevarse los 2 puntos. Quinto partido consecutivo ganado de local y sin goles en contra, a un punto de los dos punteros de la zona y con el ánimo por las nubes por haber ganado un clásico con mucha autoridad.
Que podamos sacar un buen resultado el viernes que viene en Santa Fe contra Colón, que nos permita seguir transitando esta senda emprendida con mucho trabajo e ilusión, en la cual paulatinamente se comienzan a ver los frutos.
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