Nuestras historias

Importantísimo y justificado triunfo el que logró Nueva Chicago el Domingo pasado ante Gimnasia y Tiro de Salta, que le permite seguir liderando la tabla de posiciones de la Zona B y seguir soñando con el tan anhelado ascenso a Primera División.
El torneo se encuentra en una instancia en la que el margen de error es mínimo. Así lo entendió Chicago y así lo puso en práctica, ya que salió decidido a hacer respetar la condición de local mostrando una solidez, una seguridad de lo que pretende en cuanto al juego, que fueron los argumentos más contundentes para lograr una victoria, tan necesaria como auspiciosa.
Aunque no contó con Castro y Cardozo, el equipo supo compensar esas ausencias con orden colectivo, entrega y con la contundencia necesaria para liquidar el pleito en el primer tiempo, ya que luego del 2 a 0, el visitante no estuvo nunca en condiciones de dar vuelta la historia, ni siquiera de igualar el partido.
El triunfo se basó en una defensa que otorgó seguridad, en una vocación constante de ataque y en la defensa con la pelota cuando el visitante iba en busca de descontar.
A los 16 minutos Maggi puso el primero de cabeza ganándole en la salida al arquero Abadía. Luego, a los 32 minutos, Callegari después de proyectarse definió con derecha un centro de Balbuena. A ahí el equipo se calmó y empezó a repartir posesión con el visitante, que jamás pudo romper esa solidez defensiva de la que hablamos.
En el segundo tiempo no fue tan arriesgado el equipo y comenzó a repartir la posesión con Gimnasia y Tiro. Por lo pronto, nunca estuvo en peligro el resultado.
Es cierto que hubo un remate de Carrasco que dio en el travesaño, pero en general Chicago fue siempre más, tanto cuando atacaba vertiginosamente como cuando se replegaba y salía de contra.
Y así se fue yendo el partido con muy pocas llegadas claras de parte de ambos equipos, pero siempre teniendo a Chicago como protagonista, que con coraje, ambición y seguridad en sí mismo y en lo que quiere, se llevó un partido que lo sigue manteniendo al tope de la tabla de posiciones y que nos hace soñar a todos.
Ahora viene los mendocinos y desde ya que no será nada fácil, que ellos están bastante cerca de nosotros y van a querer aprovecharse de la localía para querer ganar el partido. Chicago no debe perder nunca la calma, al contrario, con frialdad y precisión podemos hacer un muy buen trabajo en Mendoza y seguir alimentando esta ilusión que nos llena de esperanza a todos.
No nos olvidemos que ya entramos en la recta final del campeonato, así que ahora a redoblar los esfuerzos en la búsqueda del objetivo. SI queremos lograrlo no debemos perder la concentración que nos permita seguir cosechando puntos que nos acerquen cada vez más al tan deseado ascenso.